Aragón Exterior organiza el próximo 29 de mayo una jornada de reuniones de asesoramiento individual para que las empresas aragonesas resuelvan sus dudas sobre los mercados de Kazajistán y Uzbekistán.
Tras varios años de recesión en la región CIS (Comunidad de Estados Independientes, por sus siglas en inglés) debido principalmente a la crisis de las materias primas y la inestabilidad geopolítica del conflicto entre Rusia y Ucrania, la región se ha recuperado y sale con fuerza del letargo, especialmente los países que componen Asia Central. En este escenario despuntan dos mercados concretos: Kazajistán, la principal economía de la región debido a su desarrollo social y económico, y Uzbekistán, que se ha posicionado como el mercado con mayores perspectivas de Asia Central.
Para que las empresas aragonesas resuelvan sus dudas sobre los mercados de Kazajistán y Uzbekistán, Aragón Exterior organiza el próximo miércoles, 29 de mayo, una jornada de reuniones de asesoramiento individual. La cita contará con la participación de Adolfo Romero de Marcelo, consultor especializado en internacionalización en países de Asia Central y CIS y fundador ESKZ Global. «La región CIS sigue siendo una zona poco conocida que genera una alta incertidumbre a la mayoría de las empresas. Este miedo es infundado», adelanta Romero de Marcelo en esta entrevista.
Los países de Asia Central, entre ellos Kazajistán y Uzbekistán, están creciendo a mayor ritmo que el resto de países de la Comunidad de Estados Independientes. ¿En qué factores sustentan sus crecimientos del PIB, cercanos o superiores al 5%?
Asia Central es una de las zonas del mundo que más crece en la actualidad y se espera que continúe así en los próximos años según las proyecciones del Banco Mundial. Con un crecimiento medio del 5,48% en 2017, 4,66% en el 2018 y 4,70% en 2019, el grupo de países compuesto por Kazajistán, Uzbekistán, Turkmenistán, Kirguistán y Tayikistán crece a un ritmo estable y próspero. Además, se espera que el crecimiento medio para 2019 y 2020 sea de 4,7% y 4,86% respectivamente, comparado con el 1,6% de crecimiento medio de Rusia o el 2,8% de Ucrania.
Es complejo unificar razones para explicar este desarrollo pero, sin duda, un factor clave común en la región es la recuperación de los precios de las materias primas, especialmente los hidrocarburos. Países petroleros como Kazajistán y Turkmenistán han crecido exponencialmente en el último trienio, recuperando niveles previos al 2014 cuando estalló la crisis de Ucrania y la caída del precio del Brent.
Por otra parte, Uzbekistán ha vivido una transformación política y económica sin precedentes tras la llegada del nuevo presidente en 2015, momento en el que se ponen en marcha políticas de apertura y liberalismo económico que han dado lugar a un ‘boom’ económico en el país. Esta circunstancia, unida al desarrollo industrial y agrícola de Uzbekistán, hacen de este país un mercado repleto de oportunidades que lleva creciendo a niveles superiores al 5% más de diez años.
En Kazajistán y Uzbekistán, ¿cuáles son los principales sectores donde las empresas aragonesas pueden encontrar oportunidades de negocio?
Desde ESKZ Global se ha realizado un diagnóstico de sectores y áreas de interés para ambos mercados, los cuales son:
Industria auxiliar de la agricultura:
- Empresas desarrolladoras de proyectos llave en mano de invernaderos.
- Equipamiento para invernadero.
- Accesorios para invernaderos.
- Sistemas de riego.
- Fertilizantes.
- Maquinaria agrícola.
Industria de la alimentación y transformados:
- Empresas desarrolladoras de proyectos de granjas avícolas.
- Desarrollo de proyectos industriales de transformación de carnes, cadena completa.
- Diseño y ejecución de proyectos en la industria láctea.
- Maquinaria para la cadena de producción y empaquetado de alimentos.
- Importación de grano.
Industria auxiliar del ferrocarril:
- Fabricación de componentes.
- Servicios de instalación y mantenimiento.
- Proveedores de Talgo y Alstom que deseen implantarse para suplir componentes localmente.
- Servicios de ingeniería.
Energía:
- Refinerías, gaseoductos.
- Energías renovables: solar y eólica.
- Ciclo combinado.
- Servicios de ingeniería para renovación y modernización de instalaciones existentes.
Minería:
- Extracción.
- Maquinaria y equipos para la gestión, selección, transporte y manipulación de materias primas.
- Ingeniería de procesos.
- Industria auxiliar de la minería. Modernización de equipos.
- Importación de minerales.
Salud & farmacéutico:
- Exportación de medicamentos y equipos médicos.
- Sector Farmacia. Desarrollo y modernización.
- Desarrollo industrial y modernización del sector farmacéutico local.
- Construcción y gestión de hospitales y centros de salud.
Consumo & retail:
- Ropa infantil.
- Cosmética y perfumería.
- Alimentación: aceitunas, aceite de oliva, conservas, dulces (chocolates, turrón, etc.), agua mineral, zumos.
- Vino.
- Productos de limpieza, químicos.
- Juguetería.
Multilaterales:
- Principales inversores: EBRD, ADB, UNDP, WB, ISDB, EU.
- Principales sectores: energía y gas, tratamiento de aguas, infraestructuras, etc.
Kazajistán destaca por ser la principal economía de Asia Central y Uzbekistán por ser uno de los mercados regionales con mayores perspectivas. Sin embargo, las exportaciones aragonesas hasta la fecha son discretas. ¿Son mercados muy desconocidos para las empresas españolas?
Del total de las importaciones de Kazajistán y Uzbekistán, Rusia y China ocupan los primeros puestos por tradición y cercanía. Sin embargo, la lista de exportadores a ambos mercados es continuada por países como Alemania, Italia, Turquía o Corea. Esto nos indica que el principal motivo por el cual España no está en ninguno de los casos en el top 10 de importadores de la zona es por desconocimiento y falta de información, no por precio o competitividad.
Las empresas españolas han mirado tradicionalmente a otras zonas del mundo, como el continente americano o el africano. Sin embargo, la región CIS sigue siendo una zona poco conocida que genera una alta incertidumbre a la mayoría de las empresas. Este miedo infundado no se sostiene con argumentos de peso, es una falsa imagen creada por la carencia de contacto con la realidad de los mercados.
Las compañías españolas tienen un amplio margen de crecimiento, pero es importante un cambio de paradigma en la mentalidad del empresario español, que apueste más por los mercados menos explotados, donde aún queda espacio para el desarrollo y la penetración, en lugar de mercados muy saturados como los hispanoamericanos.
Estos países cuentan con importantes recursos naturales y materias primas. ¿Qué nivel de desarrollo tienen ciertas industrias como las de energía y minería? ¿Qué oportunidades y limitaciones pueden encontrar las empresas aragonesas de estos sectores?
Kazajistán es la principal economía de Asia Central debido a sus recursos naturales, siendo el undécimo país con mayores reservas de petróleo del mundo, primer productor de uranio, primero en reservas de cromo, quinto de plata y entre los diez primeros de carbón, hierro y oro.
Por su parte, Uzbekistán, es uno de los mayores exportadores de recursos energéticos del mundo. La industria del Oil&Gas está representada por el Holding Nacional, la compañía nacional Uzbekneftegaz. Este holding público engloba a más de 120 empresas del sector y abarca todo tipo de actividades relacionadas con el sector, perforación, procesado, transporte, etc.
En la actualidad, Uzbekistán cuenta con unos 230 yacimientos de petróleo, gas y gas condensado, y ostenta extensas infraestructuras para el transporte del gas (13.000 km de gaseoductos), a lo que habría que unir la explotación minera, con un gran peso en la economía nacional.
Dicho esto, se puede dilucidar que ambos campos, Oil&Gas y Minería son claves para los mercados como fuente de riqueza, y que por tanto es mucha la inversión pública y privada localizada en dichos sectores. Esta circunstancia, sin duda generará oportunidades de negocio para empresas aragonesas que operan en estas esferas como (ingenierías, fabricantes de bienes de equipos, cintas transportadoras, etc.)
En cuanto a las limitaciones, realmente no existen a priori más allá de las clásicas barreras de entrada como el idioma, la distancia o la cultura. Dejándolas a un lado, sería una cuestión de interés y seguimiento comercial constante. Es muy complejo entrar en estos mercados sin un plan y una determinación clara, por lo que las empresas interesadas deberán realizar acciones de prospección periódicas y buscar el apoyo de expertos o socios locales que le permitan acceder a estos sectores estratégicos.
Han detectado que el sector turístico, en el que las empresas españolas cuentan con un gran ‘know how’, cuenta con gran potencial de desarrollo. ¿En qué clase de proyectos se podría trabajar o aportar experiencia a las empresas locales?
Efectivamente, detectamos un potencial enorme en este sector, principalmente en Uzbekistán. Uzbekistán ostenta tres de las ciudades más antiguas del mundo como son Samarcanda, Bujará y Jiva, que en su día fueron epicentro de la Ruta de la Seda. Hemos notado un aumento exponencial de visitantes en los últimos años tras el cambio de presidencia, gracias a medidas como la supresión de visados para un gran número de países como España. Del mismo modo, el gobierno de Uzbekistán ha posicionado al sector turismo como sector prioritario, generando múltiples planes de ayuda al desarrollo de las infraestructuras y modernización del mismo. En este marco, las empresas españolas podrían aportar un gran know-how en materias como la gestión hotelera, consultoría, planificación y desarrollo de cadenas hoteleras de renombre internacional.
¿Existen incentivos o limitaciones para la inversión en determinados sectores?
La inversión está incentivada en ambos mercados con beneficios, exenciones impositivas, cesión de terrenos en zonas aduaneras especiales, etc. En ningún caso la inversión extranjera tiene limitaciones, más allá de aquellos sectores como el Oil & Gas o la Minería, aún controlados o participados en su práctica totalidad por los gobiernos de ambos países.
De hecho, en esta línea, Kazajistán se ha posicionado como el país número uno en el ranking “Doing Business” de Banco Mundial, en la categoría de “Protección de inversores minoritarios”, gracias entre otras medidas a la creación del “Astana International Financial Centre (AIFC)”, el cual pretende ser el Hub financiero y de inversiones de referencia en Asia Central.
La escasez de una clase media consolidada y con amplia base poblacional, ¿supone un importante freno para los productos de consumo? ¿Qué tipo de productos tienen mejor salida? Desde el punto de vista del consumidor, ¿se valoran los productos de importación?
Me gustaría diferenciar en este punto Kazajistán del resto de economías de la zona. Kazajistán sí goza de una clase media que podríamos considerar consolidada, con una renta per cápita que supera los diez mil dólares en 2018. El consumidor kazajo valora y consume los productos y marcas extranjeras, y vemos cómo los niveles de importación se han recuperado y se acercan a niveles pre-crisis de 2014. Productos como el aceite de oliva, las aceitunas, dulces, café, cárnicos o conservas vegetales tienen buena entrada y son de sobra conocidos.
En cuanto a Uzbekistán y el resto de mercados, se podría decir que el camino está por hacer. Uzbekistán, concretamente, estaba cerrado prácticamente a la importación por los altos aranceles y la imposibilidad que existía de hacer pagos en moneda extranjera hasta hace poco más de dos años. Todas estas barreras ya no existen. Estas circunstancias han provocado que haya muy pocas marcas europeas en los lineales por ahora, pero sin duda esta situación cambiará pronto por el auge económico y la apertura, así como por el deseo del consumidor de obtener nuevas marcas de calidad.
¿Existen condicionantes en la operativa a los que las empresas deban prestar especial atención?
En general, no es habitual encontrar grandes dificultades operativas a los negocios en los mercados de Asia Central más allá de la logística debido a las largas distancias y el alto coste del transporte, aunque este factor es común para nuestros competidores europeos.
Por otra parte, los aranceles a la importación no son un problema para la mayoría de productos españoles, especialmente en Kazajistán, donde existe la necesidad de importar prácticamente todo aquello que no sean materias primas, debido a su escasa industrialización.
Uzbekistán, por su parte, más industrializado y con un tejido productor local desarrollado (aunque en muchos casos desfasado y obsoleto), sí pone más trabas a la importación extranjera con aranceles algo más elevados a aquellos productos que se fabrican localmente (como los productos frescos o algunos materiales de construcción), pero desde hace algunos años se han reducido enormemente.
En cuanto a la forma de pago más habitual y recomendada, destacaríamos la transferencia bancaria con “advance payments” cuantiosos, que pueden superar un 50% del total. Las Cartas de Crédito no son muy habituales, exceptuando grandes proyectos que cuentan con el apoyo del gobierno u organismos multilaterales.
Por tanto, una buena negociación se basará en asegurar la consecución del mayor porcentaje de la venta antes de la salida de la mercancía.