El presidente Lambán quiere evitar “quebrantos irreversibles” para llegar a una cierta normalidad en el tercer trimestre
El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, ha pedido al Gobierno de España que se aplique el cierre de toda la actividad económica, excepto los servicios esenciales, con “cierta flexibilidad” para “adaptar” esta medida a la realidad industrial de la Comunidad, de manera que puedan abrir algunas empresas que, en condiciones normales, no tienen la consideración de esenciales.
Por ello, ha adelantado que ya están trabajando en este aspecto, tras hablar con la ministra de Industria, Reyes Maroto, para establecer´un decálogo de actividades industriales, que sin ser estrictamente esenciales, sí son definitivas para el buen desarrollo de otras que sí lo son claramente. Con este fin, se está analizando cuáles deben ser contempladas en el decreto de actividades esenciales del Gobierno central. Lambán ha mostrado su esperanza en que entre hoy y mañana se pueda lograr una autorización para mantener abierta un mayor número de activides de la Comunidad y evitar con ello “quebrantos irreversibles”.
El presidente aragonés ha explicado además que, bajo la dirección de la consejera de Economía, Marta Gastón, ya se está organizando un equipo de economistas para evaluar el impacto que la crisis sanitaria tendrá en la economía aragonesa.
Y es que aunque Lambán ha dejado claro que comparte “una por una” todas las medidas adoptadas por el Ejecutivo de Pedro Sánchez, también ha defendido la necesidad de evitar la paralización de la economía como ya trasladó el pasado domingo a Sánchez en la videoconferencia de presidentes autonómicos.
Ha apostado por buscar “un equilibrio virtuoso” entre la seguridad sanitaria y la actividad económica y ha advertido de que “después del coronavirus vendrá un virus económico no menos difícil de combatir”. Y ha reparado en que si en el tercer trimestre del año podemos estar volviendo a una cierta normalidad, tras llegar a la meseta de la crisis sanitaria, “lo que no podemos provocar ahora son destrozos irreversibles en la economía”.
Javier Lambán ha defendido una política común de la Unión Europea para hacer frente a la crisis económica que vendrá tras la sanitaria y ha puesto en cuestión algo que ahora se está pagando, como la “dejación de responsabilidades” hecha por Occidente durante muchos años, cuando decidió suministrarse desde China, “la gran fábrica del mundo”, por lo que ahora “carecemos de capacidad propia y la posiblidad de abastecimiento se complica”.